El exalcalde de Ibagué Luis H. Rodríguez recibió una nueva condena de 8 años y 9 meses de prisión, en el marco de las irregularidades cometidas durante la contratación de los escenarios para los Juegos Nacionales y Paranacionales 2015. Esta decisión, emitida por un juez de conocimiento, se suma a tres condenas previas por el mismo entramado de corrupción que afectó la infraestructura deportiva de la ciudad. Rodríguez aceptó su responsabilidad antes de iniciar el juicio oral, lo que avanzó hacia una sentencia condenatoria por los delitos de 'contrato sin cumplimiento de requisitos legales, interés indebido en la celebración de contratos y peculado (malversación...) por apropiación'. Como consecuencia, además de la pena de prisión, fue inhabilitado por 9 años y 9 meses para ejercer cargos públicos y deberá pagar una multa equivalente a más de 6.182 salarios mínimos mensuales vigentes. También le fueron negados beneficios como la detención domiciliaria y la suspensión condicional de la pena.
Según la Fiscalía, uno de los hechos clave correspondería a un convenio entre el Imdri, Coldeportes y la Gobernación del Tolima para los estudios y diseños del Estadio Manuel Murillo Toro. Allí, a través del entonces secretario de Planeación, se habría contratado a un particular que no cumpliría con los requisitos técnicos por un monto superior a $800 millones, con lo que se habrían vulnerado los lineamientos legales de la contratación pública. El ente acusador también acreditó irregularidades en un segundo convenio destinado a la remodelación de los escenarios de la calle 42, donde se configuró un peculado por $7.797 millones, cifra que habría representado una afectación significativa a los recursos públicos y al avance de las obras deportivas proyectadas para los Juegos Nacionales.
Además, el fallo judicial determinó que existió un interés directo en la contratación del abogado Orlando Arciniegas Lagos como consultor por $58 millones, operación gestionada a través del entonces secretario de Hacienda. Arciniegas, figura central del desfalco a los Juegos Nacionales, ya cumple una condena por estos mismos hechos, que involucraron una estructura irregular de contratación y apropiación de recursos. Con esta nueva decisión, se consolida el alcance judicial sobre uno de los mayores escándalos de corrupción en la historia reciente de Ibagué, con obras inconclusas, pérdidas económicas millonarias y una serie de condenas en contra de quienes intervinieron en la planificación y contratación del proyecto deportivo más importante que habría enfrentado la ciudad en la última década.
Vía: El Cronista • El Olfato


